Una de las últimas del chalado de Guy Ritchie, un tipo que me gusta mucho.
Podemos recordar cosas como Revolver, o Snatch., películas con las que había disfrutado bastante.
Ahora, con RocknRolla lo ha vuelto a hacer, me ha gustado mucho.
Es una película muy entretenida con una buena historia como a las que nos tiene acostumbrado Guy Ritchie.
También como otras veces Guy Ritchie ejerce un control absoluto sobre la dirección y el guión y siendo también uno de los productores.
Una de esas series sobre las que tengo hablar con todo el mundo.
De esas que me gusta recomendar y de las que me gusta contar que es una cosa buena.
Fue estrenada el pasada mayo en la BBC, tiene 6 capítulos y ya estoy esperando con ansias su continuación.
Sí, de acuerdo, es de polis y asesinos en serie, pero es diferente a lo que nos tienen acostumbrados y lo consiguen sin ofrecer algo demasiado original o demasiado extraño.
Tiene una buena historia, sobretodo esta bien contada y además poco a poco, capítulo a capítulo, engancha. El final de la temporada es impresionante.
Si estas en Barcelona y te gustan los restaurantes tienes que ir a probar el Dos Cielos.
El local tiene una decoración muy agradable, tonos cálidos, pocas mesas y con una buena distribución, ideal para poder mantener una conversación agradable.
Muy buenas vistas de la ciudad y con razón, el restaurante está situado en el piso veintitrés del hotel ME Barcelona.
Cuatro para cenar entre semana, totalmente necesario reservar.
Aquí están los últimos post que he visto que han despertado mi interés en la semana 32 del 2010.
Así puedes dar un paseo por los links que yo he estado mirando estos días.
Cada semana tienes un artículo con aquellos lugares o noticias de la red que encuentro más interesantes, estos artículos siempre los encontrarás en la categoría Blogs.
En Barcelona, uno de los de toda la vida, de los indispensables a los que tienes que ir si te gusta tapear.
Ya estaba alejado de las rutas turísticas cuando empezaron en el Turó de la Peira, allí solamente se veía gente local.
Y ahora que ya llevan unos cuantos años en Fabra i Puig casi todo sigue igual.
El romanticismo con el que recordamos el antiguo local siempre nos hace añorar aquella terraza, pero en fin…. todo cambia.
Comida en terracita al mediodía para dos sin mucha calor y con una cola de unos 20 minutos, impresionante su sala de espera.