Uno de estos sitios en los que el precio está bien y la comida es la típica de brasa: Manteles de cuadritos rojos y sillas rusticas de madera.
Fuimos a comer cuatro personas, nos salió por 85€, unos 22€ por cabeza.
Para empezar unos mejillones marinera (6€) muy pequeños, unos calamares romana (8€) con mucho rebozado y unas gambas al ajillo (11€) muy ricas.
De segundos, dos fideuas (9€) y dos pechugas gratinadas rellenas de gambas (11€).
Se juntaron dos cosas.
Un grupo de 39 personas sin menú concertado con una comida que no estaba bien.
El resultado: sensación de timada brutal.
Una parte del grupo, los que somos más comedidos, pedimos menú de calçotada, lo incluía todo por unos 28€. Fuimos burros.
El menú consistía en calçots de primero y carne de segundo, lo típico.
Los calçots estaban crudos, igual que el segundo que en teoría era una parrillada de carne, el pollo, el conejo, las judías, todo, absolutamente todo estaba crudo.
Siempre hay cola, pero siempre vale la pena esperar.
Es un local que parece pequeño y no lo es, es muy alargado y tiene muchas mesas, hay movimiento y aunque parezca que tardarán en darte mesa en una media hora está resuelto.
No reservan, no toman nota del nombre…. solamente salen a la puerta y preguntan a quién le toca entrar.
El sitio es bonito, está plantado en medio del centro de Granollers, justo al lado de la Fonda d’Europa con la que me parece que comparte dueños y cocina.
Hemos comido cuatro fantásticamente y además barato.
Buena comida para terminar una salida en moto.
Es un restaurante en la carretera de Rubí a Sabadell.
Es muy grande pueden hacer bodas y esas cosas con salones para 300 personas.
Tienen columpios para los niños, una piscina y una terracita.
Hacía sol, estamos en febrero y no hacía frío, se estaba de coña en la terracita haciendo el vermouthillo: Martini, olivas, patatas fritas de bolsa. Creo que me he quemado la cara y el frontón…..
Imponente restaurante en la carretera de Granollers a Masnou.
Eramos 5 y comimos de carta.
Yo pedí de primero un foie fresco con manzana y salsa tártara que estaba delicioso (15€), de segundo una dorada a la sal (18€) y de postre un sorbete de limón (5€).
También hay que destacar el carpaccio de ciervo con virutas de foie (18€), el revoltillo de espárragos y setas (11€) o la ternera con setas (15€).
Con dos botellas de Bernat Oller del 2004 (19€), cafés y postre para todos, salió por 235€. Unos 47€ por cabeza.