Restaurante en el barrio del Poblenou de Barcelona.
Es pequeño, tranquilo y acogedor. El comedor está en el primer piso.
Cena para trece personas.
Mucha gente para una cena en un sitio tranquilo, lo cierto es que parecía que íbamos a estropear el ambiente, pero como empezamos muy tarde a cenar (eran más de las once de la noche) creo que no molestamos a nadie….
Tomamos los menús que consistían en platillos para compartir.
Restaurante de Girona, en Tregurà a 1.480 metros de altitud.
Es un restaurante grande, con muchas mesas.
Aún así y como era un día de los del puente de la constitución, nos dieron mesa para comer a las cuatro de la tarde.
La decoración es correcta, no es un sitio feo ni descuidado.
Y aunque los que trabajan allí debieron tener un día muy duro con tanto pixapins por el local, fueron muy agradables con todos nosotros.
Fuimos a comer cinco.
Un sitio muy correcto.
Es serio y formal, la comida tradicional.
Resulta un sitio en cierto modo íntimo, tranquilo.
Las mesas están repartidas en salas pequeñas y también tienen habitaciones con espacio para grupos reducidos.
Encuentro que está muy bien en su estilo, pero por cuestión de gustos personales prefiero los sitios un poco más innovadores o que me pueden sorprender con algo diferente.
Si buscas lo que ofrecen, es perfecto. El trato es cordial y muy agradable.
Todo un descubrimiento.
No lo tenía controlado y eso que está en una calle que conozco muy bien, está justo al lado de el Mossol.
Nunca he tenido ganas de entrar a probarlo y hoy al fín me he lanzado, hemos entrado por casualidad y me ha encantado.
Sorprende la decoración, es tremendamente tradicional pero nada recargada, con muy buen gusto y nada anticuada, mesas grandes, espaciadas y con muchos detalles.
Hemos ido tres a comer un Domingo, había sitio, sin problemas de mesa.
Estupendo sitio, bien de precio si te ajustas al menú.
En cuanto a la decoración y para mi gusto es demasiado cargado, con aires un poco pasados de moda, pero resultón.
Es un local grande y se puede encontrar sitio aunque sea a última hora sin reserva.
Escogimos la opción de menú de 28€.
La carta del menú es excepcionalmente extensa
Cenamos bien pero sin sorpresas agradables.