Restaurante Nepalí en la zona de la Plaza Joanic en Barcelona.
Está situado en un local alargado con bastante mesas y mucho espacio entre ellas.
Todo el local es prácticamente interior a excepción de la puerta de entrada.
La decoración es sencilla, con muchas referencias a su país, manteles de hilo y paredes de color naranja.
Comida para dos un día al mediodía, no había gente, no hacía falta reserva de ningún tipo.
Una maravilla, ha sido estupendo.
El local no es muy grande, no muy iluminado, en cierto modo romántico y está en un sitio no muy transitado, tienes que buscarlo.
Cena para dos con reserva un sábado por la noche, lo de la reserva es importante especialmente los fines de semana.
Durante la cena pudimos ver varias personas que entraron preguntando por sitio y que se tuvieron que ir sin cenar.
El resumen es uno: he recuperado la ilusión por el tataki de atún.
Justo al lado de mi trabajo, un sitio nuevo que abrió hace relativamente poco y que es toda una alternativa para comer en la zona del Circuit de Catalunya.
Esta muy bien decorado, es muy agradable, predominan el blanco y el negro y encuentro que todo está muy bien escogido.
Me gustan especialmente las lámparas y el papel pintado así como la disposición de las mesas y la organización del local.
Está situado en un segundo piso, en un principio sorprende subir dos pisos para ir al restaurante, pero luego se agradece que desde las mesas tengas la sensación de estar al pie de calle ya que el edificio está un poco hundido.
Últimamente no hablo de muchos restaurantes por aquí, he bajado el ritmo.
Pero es que me cuesta encontrar sitios nuevos que resulten interesantes, me dejo llevar por la costumbre y voy a lo seguro, voy a los sitios que me gustan y que desde luego ya están comentados entre estos casi 500 que ya tengo en el blog.
Pero hoy tengo que hablar de un coreano al que no había ido nunca antes, ha sido todo un descubrimiento.
Es un restaurante pequeño, está en el centro muy cerca de Plaza Catalunya y su entrada pasa casi desapercibida.
Es pequeño pero admite grupos numerosos para celebraciones, cuando fuimos a comer estaban esperando dos grupos grandes.
Pues ahora toca ir de mejicano una noche de sábado dando una vuelta por el raval de Barcelona.
Otro sitio de los mismos dueños es La Rosa Negra, son sitios parecidos como calcas.
Son locales pintados alegremente, vamos con alegría, con manteles de plástico resultones y con algo bastante importante estos días: con unos buenos precios.
Son restaurantes que siempre están llenos, especialmente por la noche los fines de semana.
Así que cena para dos una noche de sábado temprano, sin reservas y con suerte de no esperar.