Uno de los mayores gustos del verano es cenar en una terracita junto al mar.
El restaurante Agua está en un lugar privilegiado pero rodeado de demasiados turistas, supongo que no es una buena época para ir.
Está en la playa de la Barceloneta, junto al Hotel Arts y el pez de Frank Gehry.
La decoración me gusta, sencilla y luminosa, se nota la intención de transmitir el aire mediterráneo.
Cena para cuatro noche de sábado en la terraza, es necesario reservar, creo que hace lleno todos los fines de semana.
Y hoy toca el segundo post y final de la última excursión a Munich.
Otro típico bávaro, muy típico también, para que haya donde escoger.
No tienen terraza, es un local especialmente bonito, con mucho aire a antiguo, unas fotos en blanco y negro enormes en las paredes y bancos de madera.
Todo con cierto aire añejo y con mucho encanto, mejor visitar el local en invierno.
Dos para cenar bien temprano un día entre semana, sin reserva y no mucha gente imagino que por el verano, la oferta de terrazas y biergarten en Munich es enorme y en esta época está claro que se disfruta más que un local cerrado.
He vuelto una vez más a esta ciudad por temas relacionados con mi trabajo, así que en Munich de nuevo, esta vez fueron cuatro días a principios de Julio.
Pero varias cosas han sido diferentes, la primera es que esta vez he ido acompañado por mi pareja y le he podido mostrar las bondades del estilo Bábaro.
Y la segunda diferencia es que nunca había visto tanto sol en esta ciudad, no había ido nunca en verano, en realidad he descubierto una ciudad diferente de la que estoy acostumbrado.
Siempre estoy explorando sitios para ir a comer cerca de mi trabajo y hace ya más de un año que encontré éste por una recomendación.
Es un local más bien grande con bastantes mesas en su interior y una antigua zona de fumadores en parte de la entrada.
La decoración está bien escogida y está basada en el negro, el blanco y el rojo.
Tienen alguna mesa redonda que permite comidas agradables en pequeños grupos.
Al mediodía puedes escoger un menú muy completo por unos 13,50€ más cafés.
Terracita de verano en un lugar turístico pero que al final resultó ser una buena y tranquila opción.
Todo empezó al buscar sitios abiertos para comprar unos zapatos de manera urgente y acabar en la zona del Maremàgnum.
Era Domingo y como ya sabemos en los festivos todo esta cerrado en Barcelona, excepto este centro.
Así que si te escapas del resto de restaurantes de comida rápida que hay por allí, que no son pocos, puedes acabar en este Tapa Tapa que está en la parte más al sur.