En pleno Barrio de Gracia, en la Plaça de la Revolució.
Comida el primer día del año en una terracita eso sí a la sombra, que le tengo mucha manía al sol durante mucho rato incluso en invierno.
Aún así resulta increíble poder comer en una terracita el día 1 de enero a la sombra y no fallecer en el intento, no quedarte helado.
Este año hemos empezado con un buen tiempo impresionante, en resumen un tiempo estupendo para estar al aire libre disfrutando del solecito y de la poca gente que se atreve a salir de casa ese clásico día de resaca.
Así que comida para tres.
Unos días de turismo en Roma con la familia.
Como siempre sorprendentes los precios de las terrazas más turísticas de la ciudad, cafés a 8€ en la Piazza Navona.
Así que cuando encuentras un sitio que no se dispara de precio y que además está bien es como casi toda una suerte.
El restaurante La Cucina Nazionale está muy cerca de la Piazza Esedra, al lado de la estación de Termini.
El servicio es muy atento, la carta está en ocho idiomas y el espacio está cuidado y es agradable.
Cena para seis a base de pizza sin otros grandes festejos.
En el centro de Barcelona pero en un calle que no es una maravilla para pasear, vamos que hay que ir a propósito.
Está en la calle Aragón y por allí no resulta nada agradable pasear, donde está el restaurante es como una autopista con mucho tráfico, ésto se nota especialmente en horas punta.
El local tiene la decoración típica, la que esperas al llegar a un mejicano, con similitudes a todos los mejicanos que ya puedes conocer.
Vamos que bonitos manteles y bonitas lámparas, algo de madera y mucha publicidad de marcas de tequila y cervezas de allá.
Cena para dos una noche de entre semana, con reserva, había bastante gente pero durante algunos momentos había sitio para cenar sin reserva.
Otro sábado buscando un sitio para comer por el centro.
En este restaurante había estado hace muchos años cuando tenía otro aspecto, creo que incluso debía de tener unos dueños diferentes.
Así que es como una primera vez.
El local es grande y tiene mucho espacio para bastantes mesas, puede acomodar grupos numerosos.
Encuentro que la decoración parece sencilla aunque no lo sea del todo, abunda la madera y es muy agradable, parece el típico restaurante de cadena aunque no se si pertenece a alguna.
Así que comida para dos un sábado al mediodía tempranito, sin colas pero el local se llenó bastante al final de la comida.
Restaurante situado justo al lado de la Plaza Real, a pocos metros de Sidecar (esta info es para los que saben más de copas que de cenas).
Sinatra es un lugar muy promocionado, con amplia presencia de turistas y extranjeros así como de grupos medianos que están de celebración.
La decoración está muy bien realizada, realmente han conseguido un lugar con cierto aire Art Decó y con una atmósfera muy agradable gracias al buen uso de la iluminación.
Buena parte de ese efecto retro lo producen las reproducciones de la obra de Tamara de Lempicka que están por todas las paredes.
Así que cena para cuatro un sábado, hacía falta reserva, el sitio se llenó.