Una sencilla película de César Martínez Herrada.
Está bien, plantea una situación clásica de road movie pero a la española, con su marginalidad y sus tópicos.
Me ha gustado lo suficiente como para plantearme la revisión de una película suya anterior: Cuando todo esté en orden.
En Arena en los bolsillos los personajes aunque parezcan completamente típicos tienen cierto encanto.
Pero es cierto que no dan mucho de sí puesto que son demasiado predecibles y demasiado artificiales en muchas ocasiones.
Es una película de esas que ves como el/la protagonista lo tiene todo en contra, cómo le van saliendo las cosas mal… y no puedes hacer nada.
A mí esa angustia me gusta, con cierta medida eso sí, y aquí me ha gustado mucho.
El director es Clint Eastwood, impresionante.
Sus últimas películas son una maravilla: Million Dollar Baby, Mystic River o dos comentadas aquí como Cartas desde Iwo Jima o Banderas de nuestros padres.
Es entretenida, tiene un humor oscuro que me gusta.
No cuenta grandes cosas: una crisis de mediana edad, infidelidad, un amigo cabrón, miedo y traición.
Todo ambientado en los años cuarenta de una idealiza USA con unas buenas dosis de irrealidad y sin ninguna profundidad en ninguno de los temas tratados.
Lo bueno es que tenemos a un Chris Cooper, el eterno secundario de películas como American Beauty, haciendo de bueno y coprotagonista.
Aviso, no la veas si tienes un mal día o estas tierno.
Es un dramón duro, muy duro.
Aunque yo no sabía si llorar o si pegar a alguien.
Y aunque está inspirada en hechos reales, la familia de Alexia González-Barros se ha desvinculado por completo de la película.
Si no quieres entrar en la polémica del tema y te fijas solamente en la película te encuentras a una Carme Elias increíble y a una Nerea Camacho que me parece que dará de que hablar dentro de poco.
Bueno, tengo aquí una película que no sabía si etiquetar de palomitera o de algo un poco más serio.
Al final he optado por pensar que es algo más serio que una película como las que yo llamo palomitera y la he incluido en de la vida, pero aún así no lo hago totalmente convencido.
Me explico: si fuera una película europea quizás me la creería y seguro que la metía en de la vida.
Pero siendo una producción tan americana me resulta una película difícil de creer.
Esa dificultad me distancia mucho y aunque pueda encontrar ciertos sentimientos y ciertas situaciones cercanas, el conjunto no me resulta nada convincente.