Cena tranquila cerca de casa, un finde con pocas ganas de burcar algo nuevo.
A veces ocurre, has pasado 100 veces por delante de un sitio y te has dicho que tienes que probarlo pero siempre lo recuerdas cuando pasa por delante y no puedes entrar.
Esta vez lo vimos al mediodía y ya hicimos la reserva para la misma noche, así seguro que no se escapa.
La decoración es bastante tradicional, el restaurante Mic tiene las paredes de obra vista y todo está en tonos cálidos.
No es un espacio muy grande, haz unas diez mesas.
Josep lleva semanas insistiendo en que tengo que ir a desayunar a este sitio, ha sido una pasada, ahora entiendo la insistencia.
Todo ha sido encontrar el día adecuado para poder hacerlo.
El sitio está bien pero los ‘esmorzars de forquilla‘ que preparan son estupendos.
Creo que entendí que solamente abren para desayunos y comidas, las cenas son por encargo y para grupos, no abren en fin de semana.
Así que desayuno para dos un dia entre semana.
Había bastante gente pero encontramos sitio.
Está casi sin título, Misión imposible: Protocolo fantasma.
Vamos, algo totalmente superficial, de acción, tiros y fantasmadas varias.
Lo que busco en este tipo de películas normalmente es algo de evasión, dejar de pensar durante un rato y que me puedan sorprender con algo.
En esta cuarta parte de Misión Imposible lo cumplen todo menos lo que concierne a la última premisa de la sorpresa.
Vamos que está bien, que entretiene pero poco más.
Ya me lo había recomendado Josep, estaba pendiente el pasarme por aquí.
Y nos lo hemos pasado bien.
Como su propio nombre indica esta muy cerca de este hospital, en realidad está justo delante de la puerta principal del Hospital Clínic de Barcelona.
Hay que reservar, sin duda, tiene llenazos.
Comida para dos un día al mediodía entre semana.
Otro mediodía por BCN aprovechando que es fiesta en Munich.
Buscando un restaurante cerca de la Escola Industrial encontramos este italiano.
Había sitio en la terraza con un tiempo estupendo así que no tuvimos dudas y poco puedo decir de su interior.
Sorprende que la terraza sea bastante tranquila para la situación que tiene, justo al lado de la calle Urgell con todo el tráfico que hay por allá y sin embargo se está muy bien.
Menú para dos al mediodía de un día entre semana.